¿Cómo surgió la Radiestesia?
Existen muchas teorías de cómo surgió la radiestesia, producto de la imaginación soñadora, y del desconocimiento de ciertas claves de la magia mental.
Todas las teorías sobre su origen y causas son erróneas.



Entonces, ¿Cuál es la que aclara su origen?
La radiestesia o rabdomancia, como se la conocía muchos años antes, surgió por la necesidad del hombre de obtener ese maravilloso líquido: el agua. Así que surgió en la mente del primer zahorí, la idea de que utilizando una vara de un árbol encontraría, a una señal de ese palo, la tan necesitada agua Para eso tendría que tener conocimiento de que era posible encontrar agua debajo de la tierra, y no a los demonios. El origen hay que debérselo a esa mente desconocida y tan maravillosa que han tenido los seres humanos durante siglos, y que ahora es cuando se comienza a reconocer que la estamos despertando en un grado mínimo. Serían muchos los rabdomantes o zahoríes que surgieron en todas partes del mundo; hoy día, su existencia es reconocida por todas las potencias industriales.
¿En qué fecha aproximada se originó?
Por lo dicho anteriormente, es necesario reconocer que la radiestesia es tan antigua como el hombre. Sin embargo, algunos estudiosos de la materia señalan que hace 4.200 años se utilizaba en la dinastía china de Yu la búsqueda de agua y metales, y en los bajos relieves egipcios antiguos, se encontraron figuras que llevan una vara horquillada ante ellas. También en pinturas rupestres del año 6.000 A.C., hay un pastor con una vara en forma de “Y”, además, se han encontrado esculturas en las que hasta un sacerdote sostiene una varilla en sus manos.
LAS TEORÍAS DEL MAGNETISMO
La operación más sencilla es la utilización del péndulo por un individuo que busca una información que desconoce, o .que quiere constatar algo que ya sabe. En su definición más amplia es la “técnica de captación” por medio del péndulo, de información contenida en todos los cuerpos inertes o vivos, que posiblemente se capte en forma de ondas que todavía son desconocidas para la ciencia moderna, y que son procesadas por la mente inconsciente, de quien utiliza ese péndulo.
Una mínima vibración de los músculos del brazo y la manó, harán mover el péndulo en la forma de cómo dará la respuesta, resultado de una interpretación convencional que permitirá al que opera el péndulo determinar la ubicación (distancia), naturaleza, composición, propiedades, etc.
Casi todas las teorías que tratan de explicar de cómo funciona la radiestesia, han sugerido que los sujetos que la practican son extraordinariamente sensibles a campos magnéticos muy pequeños; también se ha afirmado que las personas que dominan esta técnica son en extremo sensitivas a los campos magnéticos de la Tierra, y que pueden percibir intensidades de menos del uno por ciento.
Indudablemente que grandes depósitos de metales o corrientes de aguas subterráneas tienen un campo magnético detectable por magnetómetros de alta sensibilidad, y es posible que estos campos magnéticos tengan alguna relación con el propio campo magnético del ser humano.
Pero, cabe preguntarse: ¿no existen muchas interferencias por los múltiples campos magnéticos?
LA SENSIBILIDAD HUMANA
Según las investigaciones realizadas por Ives Rocard en 1963, con instrumental avanzado y sensible llegó a pretender que los radiestesistas pueden percibir variaciones de campos magnéticos mil veces menores que el campo magnético terrestre.
Sus resultados no fueron aceptados por su metodología poco ortodoxa. Y por la pequeña cantidad de sujetos utilizados en la experimentación. Otro investigador más reciente, el científico húngaro Zaboj Harvalik, realizó una investigación con el ‘radiestesista Wilhelm Wilhelm De Boer, y llegó a establecer que ellos podían percibir cambios de hasta un billón de veces menores que el campo magnético terrestre.
Otra teoría que intenta explicar de cómo funciona el fenómeno radiestésico, es la que considera que el radiestesista se convierte corno en un radar, en este caso se afirma que existe una emisión de energía electromagnética que parte del cuerpo del sujeto. Hasta ahora, con las pruebas que se han hecho, no se ha logrado probar esta hipótesis.
El fenómeno que nos hace pensar que la práctica de la radiestesia sea un fenómeno electromagnético, es que cuando se produce una tormenta es muy difícil trabajar con la radiestesia.
En la Unión Soviética, la radiestesia forma parte de las ciencias en investigación, y es conocida como “Método de Efectos Biofísicos” (MEB).
Uno de los destacados científicos de Leningrado, Nikolai Sochévanov, quien hizo un descubrimiento de una veta de plomo volando en un avión en 1967, ha tratado de descubrir cómo funciona la radiestesia. Sochévanov colocó en la nuca de varios radiestesistas fuertes imanes en forma de herraduras, descubriendo que cuando estaban situados muy cerca de la cabeza, el número de revoluciones (vueltas) de la vara (péndulo) se reducía, pero si lo colocaban a 23 cm de distancia la vara se volvía inesperadamente en dirección del imán. El holandés Tromp, que también ha investigado a radiestesistas, afirma que éstos registraban un campo magnético muy débil dentro de una habitación, y que podían percibir perturbaciones en el campo magnético terrestre, que luego se confirmaba mediante magnetómetros. La verdad es que esto no tiene nada nuevo; todo el mundo sabe que por ejemplo los enfermos de reumatismo declaran que les duele una pierna cuando va a llover, o hay tormenta.
AHONDANDO MAS EN LA TEORÍA DE LA RADIESTESIA



En 1665, el científico holandés Christian Huygens observó que dos relojes de péndulo’, colgados uno al lado del otro en una misma pared, llegaban a balancearse juntos a un ritmo preciso. En sus investigaciones llegó a descubrir que los péndulos se sincronizaban mediante un ligero impulso transmitido a través de la pared. Aquí podemos descubrir una clave: la pared viene a ser el medio que facilita el fenómeno de acoplamiento en los péndulos estudiados. En consecuencia, ¿cuál sería el medio que facilita que se produzca el fenómeno de la radiestesia? Sigamos: cuando dos personas se acercan o están juntas en una reunión sin hablarse, pero mentalmente están conectados, se puede comprobar que sus respiraciones y latidos comienzan a tomar el mismo ritmo. Es como si dos osciladores, de los que se usan en la televisión, estando en un mismo campo (se supone en un mismo televisor) vibraran aproximadamente al mismo tiempo. Entonces tienden a acoplarse, de tal forma, que llegan a vibrar exactamente al mismo tiempo. Este es el fenómeno que ustedes pueden apreciar en las pantallas de sus televisores: no se tiene que conseguir un ajuste perfecto al mover los botones de horizontal y vertical, pues tan pronto como las frecuencias se aproximan, se ajustan ellas solas de repente, como si “desearan” latir juntas.
Pero ¿qué será lo que permite que un radiestesista opere? Es en la moderna física cuántica donde debemos buscar las respuestas. Así, según el físico J. S. Bell, que en 1964 formuló lo que se conoce ahora como el Teorema de Bell, afirma que: “ninguna teoría de la realidad compatible con la teoría cuántica puede exigir que acontecimientos espacialmente separados sean independientemente entre sí”. Como todo teorema, tiene que ser demostrado; y es lo que está sucediendo cada día en casi todas las ciencias de la mente y el espacio, que lo encuentran más adaptable a sus fundamentos. Es por eso que debemos aceptar los fenómenos de la radiestesia, aunque parezcan contradecir las experiencias normales y corrientes. Ya ha sido probado y confirmado, experimentalmente, que partes del Universo, al parecer separadas, operan juntas como elementos de un todo más grande. En lo que se refiere a la actividad parapsíquica, ya se ha demostrado la existencia del fenómeno “Visión a Distancia”. Por eso no nos debe extrañar que una persona realice una exploración utilizando un péndulo, con resultados positivos, es decir, con éxito.